"Cuando en sus trompas soplan los monteros,
anunciando comenzar la cacería,
los nerviosos corceles se impacientan;
piafan; relinchan; bullen a porfía.
¡Adelante!, corcel, mi caballito bravo.
Cabalgando en tu lomo, iré gozoso
con los monteros, en busca de la caza,
montado sobre ti, siempre orgulloso."
"Este caballo de montar es un "purasangre". Enérgico, rápido y buen saltador. De presencia arrogante y hermosa lámina, es un animal con buena constitución y gran vigor. Su alzada es variable, pero en todos los casos resulta armoniosa y de finísima presencia."
Fuente: "El libro de los caballos", Ed. Cultura y Progreso, S.A., Bilbao, 1968.
No hay comentarios:
Publicar un comentario